El libro electrónico, también conocido como e-book, ecolibro o e-reader, se trata de un dispositivo electrónico para la lectura de libros en versión digital. Permite la visualización del texto en una pequeña pantalla a diferentes tamaños según las preferencias del lector, y la descarga y almacenamiento de estos.
El mercado del libro electrónico pasa desapercibido por la mayoría de la gente, y actualmente solo poseen el e-book, aquellos conocidos como “early adopter”, personas que aman estar a la moda y poseer la última tecnología. No obstante, debido a su comodidad, puesto que puedes disponer de millones de obras en un solo aparatito, y la ventaja de su movilidad, se estima que el libro electrónico tenga una gran aceptación por la sociedad. Además, ya que no tiene retro-iluminación (tecnología de tinta electrónica), es como leer un libro en papel, por lo que no generaría cansancio alguno para la vista. También permiten buscar citas, diccionario, notas o subrayado, cuentan con una duración de la batería muy alta que permite la lectura de unas 8000 páginas antes de su recarga y los más desarrollados, integran la conexión a internet que permite el acceso a puntos de venta de libros electrónicos entre otras.
Como datos significativos, según un estudio realizado en abril de este año por el Ministerio de Cultura, el libro electrónico registro en 2009 un aumento del 48% respecto al año anterior, aunque para el caso español, el proceso es más lento, pues la mayoría de editores aún siguen apostando por el libro en papel, y existe una gran escasez de textos en castellano. De todas maneras dicho informe, mantiene también que el ecolibro (dentro de la industria librera), representará el 50% del negocio para el 2015.
Pero el e-book también cuenta con algunos aspectos negativos. Destacamos su elevado precio, como consecuencia de ser algo novedoso, la escasez de este entre la población, y la necesidad de grandes inversiones para la digitalización de los libros. También, la opinión sobre algunos expertos sobre su repercusión en la columna vertebral, por una posición inadecuada mediante su utilización.
No obstante, uno de los obstáculos principales, es que la mayoría de los libros digitales son copias del libro impreso en pdf, por lo que son complicados de leer. Para entendernos mejor, la piratería. La Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), ha publicado que debido a la piratería sobretodo de libros científicos y académicos, se han generado una pérdidas cercanas a los 150 millones de euros, lo que supone entre los editores una gran preocupación por que ocurra lo mismo que ha sucedido con la industria del cine o de la música.
Sin duda, se trata de un producto en nacimiento que aún le queda un largo camino que recorrer, y que en mi opinión, tardará mucho tiempo en sustituir al texto impreso tradicional, y además, deberán adoptarse un marco legal para su comercialización y su tributación (PROYECTO ENCLAVE). No podemos olvidarnos tampoco que existen numersos compañías como Papyre, Amazon, o Sony, las cuales venden sus diferentes modelos, por lo que resulta difícil que el consumidor pueda elegir y conocer sus preferencias ante tal desconocimiento de la oferta.
Actualmente y cada vez más,  muchas personas se pasan un gran tiempo delante de una pantalla, de un ordenador, y muchos usuarios consideraran este  nuevo dispositivo como otro cansancio más para la vista. Aunque es cierto que el libro electrónico presenta grandes ventajas como las comentadas anteriormente, personalmente creo que el placer de coger un libro gordo de papel nunca desaparecerá, al menos yo no quiero depender de una pequeña pantalla para leer.